A lo largo de la celebración, pudimos disfrutar de un acto en el cual participaron todos los alumnos del centro desde infantil, con los más pequeños, hasta bachillerato.
Los alumnos de secundaria, elaboraron una vid representando el amor de Dios. Alrededor de sus ramas se fueron colocando corazones en cuyo interior se plasmaba distintos compromisos.
Fue una actividad muy emotiva e inspiradora la cual abarcaba tanto la tradicional oración como el sentimiento en la letra de una canción.
Aquí os dejamos un breve reflejo de lo acontecido ese día.